Una de las principales decisiones en un sistema de calefacción, es la elección de los radiadores o emisores térmicos que queremos instalar. También es importante definir el modelo y la potencia térmica necesaria para cada uno de ellos, en función de la carga térmica del local o dependencia donde se van a situar.
Los equipos fan coil utilizan el agua como elemento de calefacción o refigeración. Estas unidades reciben agua caliente o fría desde una enfriadora remota o caldera y lo hacen circular por unos tubos. El ventilador impulsa el aire y lo hace pasar por los tubos donde circula el agua, produciéndose así la termotransferencia.
El suelo radiante consigue calentar las masas de aire uniformemente y así mantener la sensación de confort durante mayor tiempo que cualquier otro sistema convencional. Además es un sistema de calefacción capaz de usar de forma más eficiente los recursos energéticos, algo que permite que ahorremos en la factura final.
La instalación requiere de una red de para climatizar las estancias, una máquina interior y una unidad exterior. Es una gran opción a nivel estético. En lugar de tener un gran aparato por habitación, solo veremos una rejilla. Es recomendable cuando queremos climatizar muchos espacios a la vez con frecuencia.
Un multisplit es un sistema de aire acondicionado que, con un solo aparato externo, puede hacer funcionar hasta 8 unidades internas. Además, con la tecnología inverter podemos conseguir un ahorro energético considerable. La instalación requiere de una máquina interior por cada habitación y solo una unidad exterior para todas ellas. Permite controlar cada unidad interior de forma individual. Es decir, nos permite escoger en qué zonas climatizamos.
Los equipos fan coil utilizan el agua como elemento de calefacción o refigeración. Estas unidades reciben agua caliente o fría desde una enfriadora remota o caldera y lo hacen circular por unos tubos. El ventilador impulsa el aire y lo hace pasar por los tubos donde circula el agua, produciéndose así la termotransferencia.